domingo, 9 de noviembre de 2014

Día 9.- ¿Cuál ha sido tu peor sesión? ¿Por qué?

Gwydion:
     Como he dicho muchas veces, como jugador siempre soy muy parecido y no tengo ninguna sesión que destaque especialmente y siempre me lo acabo pasando bien (aunque unas mejor que otras).

     Como Master la peor, y con diferencia, es la primera que dirigí puesto que el grupo se me subía a las barbas y toda la aventura acabó siendo un completo desastre.  En época más reciente recuerdo una aventura de Stormbringer con la que no conseguí enganchar a la audiencia y me dejó un regusto muy malo al acabar la sesión. Tan malo que ni he vuelto a retomar el juego ni hemos hecho ademán de acabar la aventura.


Stormbringer-JOC-1990.jpg

Sergio Antón:
     En este punto hay varias posibilidades, como jugador y como director.

     Como jugador, recuerdo una sesión de Stormbringer en la que hicimos un experimento en los primeros años del Club de Rol “El Dragón de Ham”. Por aquel entonces hacía muy poco que el ayuntamiento nos había cedido un local a las diferentes asociaciones juveniles y estábamos muy contentos de poder jugar en un sitio que podríamos llamar “nuestro” sin que fuera en casa de ningún socio ó en un rincón de algún sitio público. Aprovechando esto, se organizó una partida multitudinaria para luego hacer criba y conseguir un grupo más reducido y (quizás) más estable.

     Total, que nos llegamos a juntar 14 jugadores y tras una breve introducción comenzó una pelea. Tiramos iniciativas y comenzamos. El primer turno duró 2 horas, con sus 120 minutos. Claro, había una dispersión brutal entre los jugadores. Pero además, hacía poco que yo llevaba lentillas y se me cayó una. Lo que no había dicho hasta ahora es que el local había estado “abandonado” muchísimo tiempo y su salubridad era cuestionable. Pues ahí estaba yo, por el suelo mugriento buscando mi lentilla y después de 120 minutos ¡dejando pasar el turno!

     Por supuesto, me mataron el personaje, cosa que agradecí en extremo porque es una experiencia que no me gustaría volver a pasar.

     Lo importante, sí, al final encontré la lentilla, la lavé como pude, me la puse y me fui a casa porque se me puso el ojo rojo como un tomate.


Nos vemos en la próxima entrada, ¡y jugad mucho hasta entonces!

2 comentarios:

  1. ¿El dragon de ham no es un club de rol de la zona de alicante?

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    1. Sí, de San Vicente del Raspeig, donde vivimos casi todos los monos.
      El club esta, digamoslo amablemente, congelado, pero me alegra que te suene.
      ¿Lo conociste? ¿Viniste a algunas jornadas?

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